Cosecha Roja.-
“Lo perseguí con agua bendita, lo bañé de arriba a abajo, por todos lados”, contó ante las cámaras el cura Juan Franck. Así relató que ‘exorcizó’ a un niño en el patio de la escuela 54 de la ciudad de Crespo, a 35 kilómetros de Entre Ríos. “Esto no aparece contemplado en ninguna normativa de educación ni de salud mental, es un gesto totalmente discriminatorio poner a un niño en situación de endemoniado: nos lleva a épocas medievales”, dijo a Cosecha Roja Roque Santana, supervisor de escuelas de jóvenes y adultos del departamento de Paraná.
Franck llegó a la escuela porque lo llamó la directora. “Tenía un caso muy serio de un niño que alarmaba a todo el grupo y necesitaba un sacerdote”, dijo el padre de la parroquia San José. “Cuando llegué, me encontré con el chico en el recreo arrastrándose en cuatro patas. Me miró y pasó de largo. Vinieron como diez docentes y la mamá. Estaba movedizo”, contó.
– ¿Vos sabés rezar? – le preguntó y el nene no respondió.
“Hicimos una oración de liberación. Díganle como ustedes quieran, ‘exorcismo’ suena muy fuerte. Cuando agarré el agua bendita, el chico agarró una silla, la tiró y se fue, se metió en un rincón, quería subir al techo”, contó Franck.
La primera versión que se conoció fue que los adolescentes habían jugado al ‘Charlie charlie’, parecido al de la Copa pero que se hace con lápices y que se popularizó después de que Warner Bros lo utilizara para promocionar la película de terror La Horca. “Son todas cosas inventadas por el diablo y los chicos se obsesionan. El diablo fue el arcángel más bello que creó dios”, dijo el cura.
El cura ya era conocido porque, a fines de 2010, había dicho que un niño de 9 años tenía ‘poderes para sanar’. Lo hizo en medio de una misa en Boca del Tigre, a siete kilómetros de Crespo. Fue el 8 de diciembre (Día de la Virgen) y contó que el chico tenía apariciones de Jesús y de la Virgen ‘casi a diario’. En las declaraciones en las que relata el exorcismo en la escuela también dice que ‘el reiki es la antesala del infierno’.
Hoy la directora de la escuela Ofelia Hasenauer dijo que el niño sufre ‘problemas de salud’, que ese día tuvo un cuadro convulsivo y que por eso llamaron a un cura. “Sea que tuvo un problema de conducta o una patología, las autoridades deben llamar a profesionales vinculados con esa problemática, de ninguna manera a un sacerdote”, explicó Santana. “Ser perseguido con agua bendita es totalmente traumático y puede marcar al niño de por vida”, agregó.
La Dirección Departamental solicitó un informe a la escuela para que argumenten. El Consejo General de Educación evaluará qué medidas se tomarán. La iglesia, en un comunicado, desmintió que haya sido un exorcismo: “Es importante resaltar que lo que realizó el presbítero fue una bendición y no un exorcismo como trascendió en su momento. Para llevar a cabo un exorcismo es necesario generar ciertas instancias previas como la autorización del Obispo, estudio y análisis de la situación de la persona, entre otros. Y ésta no fue la situación presentada en medios de comunicación”, publicaron en Entre Ríos Ahora. “Lo grave es que fue en el ámbito público, en una escuela que es laica, libre y gratuita. Lo que hicieron las autoridades se basa en una concepción ideológica de otra época”, dijo Santana.
Imagen: Película Poseído
[Nota publicada el 25/6/2015]
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