A Melody Barrera le dispararon desde un auto. Fueron al menos seis balazos. Tenía 27 años, era trans y hacía parada en una de las “zonas rojas” entre Guaymallén y la capital de Mendoza, a metros de donde el sábado 28 de agosto a la madrugada encontraron su cuerpo. Ayer el único sospechoso del travesticidio fue detenido en la propia comisaría donde trabaja: Darío Chaves Rubio es policía en la unidad departamental N° 34 y lo complican varias pruebas.
En la zona donde paraba Melody había que pagar un cupo que garantizaba la seguridad. La intersección de Costanera y Correa Saá, sobre la zona este de Mendoza capital, es VIP. Melody era conocida por hablar poco y ser muy reservada, incluso varias de sus compañeras no sabían su apellido. Su rutina era ir de viernes a domingo a la mañana. El resto de los días volvía con su familia a Luján de Cuyo
Sugún una persona allegada, en una época donde paraba ella era muy seguro, incluso venían de otros lados porque una se sentían. “Que la hayan matado a Melody no se entiende, porque ella era de las más tranquilas”, dijo a Cosecha Roja una conocida.
El 28 de agosto hacía mucho frío. Quienes estaban en el lugar dicen que hubo una pelea, gritos, y que después de la discusión escucharon balazos y un acelerador a fondo. El auto, un Wolkswagen Bora gris igual al que tiene Chaves Rubio, quedó registrado en una de las cámaras de seguridad de la zona.
Darío Jesús Chaves Rubio tiene 31 años y según fuentes de la causa un testigo declaró haberse cruzado con él antes de la muerte de Melody. Le dijo que iba “a buscar un arma y a cagar a tiros al travesti”.
El testigo describió a un hombre con físico similar al del policía y dio detalles que coinciden con el Wolkswagen. También hay señales geo-referenciales que ubican a Chaves Rubio en el momento y lugar del crimen.
La titular de la Fiscalía N°8 de Guaymallén, Andrea Lazo, lo imputó anoche por “homicidio agravado por el odio a la expresión de género en concurso ideal con homicidio agravado por el uso de arma de fuego, y en concurso real por violación de cuarentena”.
Las balas que mataron a Melody coinciden con la 9 mílimetros reglamentaria de Chaves Rubio.
Si lo encuentran culpable podría ser condenado a perpetua.